Por: Jaime Del Valle
Justo estoy viendo el juego del Thunder contra los Warriors, se dan con todo y se escuchan los gritos en la duela y pienso: que bueno sería estar ahí… pero recuerdo que el sábado estuve ahí ¡Y fui el mas feliz!
La semana pasada fue la mejor manera de inciar el 2017, con Basketball, justo en esta ocasión la NBA celebro 25 años de traernos juegos y hacernos sentir lo que antes solo veíamos por la tele. Hace 25 años vimos al mejor pivoteador de todos los tiempos, Hakeem Olajuwoon con los Rockets de Houston ganarle a los Mavericks de Dallas.
La semana estuvo llena de actividades, desde una fan zone en Chapultepec, firmas de autógrafos, visitas a lugares turísticos para finalizar el jueves con el Juego Suns vs Mavs y el sábado Suns vs Spurs. El jueves vimos un juego regular, nada del otro mundo Deron Williams, Dirk Nowitzky y JJ Barea le ganaban a Bledsoe y Booker 113 a 108 en la arena ciudad de México.
Vimos a los Soles de Phoenix venderse como equipo local y siendo honesto no esperábamos mucho de ellos, pero el sábado nos callaron la boca.
Venian los Spurs, el gran equipo que desde que llego Popovich le han enseñado a la NBA que el juego en equipo aun vive y es importante, que juegan para todos y no hay una estrella, que buscan el tiro seguro y jalan marcas para hacerlo mas fácil como equipo, que pararon a Lebron, que pararon a Curry y con todo eso Los suns ganaron el sábado.
via USA TODAY Sports
Bledsoe comenzó a romper la defensa, pasaron por su marca Parker y Kawai fue difícil contenerlo los primeros dos cuartos, pero para el 3er cuarto apareció Devin Booker el 1 de los Suns y entre ellos dos rompieron la defensa, no dejaron hacer nada a Aldridge la joven promesa que llego para ocupar el lugar de Duncan, Gasol que ese día no demostró nada de lo que juega, Manu que solo encesto algunos puntos y no prendió, el único que saco la casta fue Kawai quien encesto 38 puntos.
Le voy a los Spurs desde que Rodman jugo con ellos y debo confesar que aunque es mi equipo me gusto lo que sucedió el sábado, nadie esperaba que los Suns ganaran, el 95% de la arena le íbamos a los Spurs y poco a poco nos fue dando gusto como estos dos jugadores hacían que todo el público los empezara a apoyar.
Y así fue como saliendo ya quería un Jersey de Booker y me encanto salir y pensar que este deporte es totalmente impredecible y que todos los que jugamos Basket somos todo corazón en la cancha y podemos lograr cosas inesperadas.
