Por Jaime Del Valle
Este año me estrené como papá, me encanta decirlo y relatar la historia: Compré una hamburguesa y venía con papas incluidas, las respuestas siempre son una sonrisa y todos entienden el mensaje… Yo me uní a una familia.
Juan Pablo tiene 6 años y cuando lo conocí, empezaba el proceso de descubrir el mundo, aún mira las películas de Disney una y otra vez, quiere ganar en todo, imita algunos de mis hábitos y no tardo en darse cuenta que me encantaba el basketball y los tenis.
Una de las primeras películas que le compartí fue Spiderman: Into the Spiderverse, a partir de ahí se creó un vínculo especial entre él, Miles Morales, Sunflower y yo, pero algo faltaba, un par de Air Jordan Retro High OG que no conseguí pero el vínculo sneaker se necesitaba cerrar.
El vínculo cerró con un par de DON Spiderman x adidas y un Son of Mars de Jordan Brand. Debo confesar que hasta antes de ese domingo, no me quedaba claro de dónde salían esos lazos en donde el padre usaba tenis de basketball y el niño también, siempre me preguntaba ¿porque gastar en un par de tenis que dejaran en meses?. Ahora no necesita explicación, solo es algo que nace desde lo más profundo de tus pasiones.
Este post es para todos ustedes que deciden heredar algo mas que cosas materiales a sus hijos, a todos aquellos que quieren que su hijo gane en la duela, llore, sufra, salga de la duela sobre los hombros de sus amigos siendo un héroe o salga derrotado en medio de las lágrimas por haber fallado el tiro del gane.
En mi caso yo gané todo en el Basketball: amigos de la vida, lecciones, madurez, seguridad, historias increíbles, lesiones que me enseñaron a superar la frustración y la depresión, el día de hoy nos toca decirles a nuestros hijos: Como eres en la cancha eres en la vida.
