La Alegría de Desempacar

Un ensayo filosófico sobre cómo dar vida a nuestros pares y lo que en ellos ponemos además de nuestros pasos

Por Gerardo Cárdenas

Recientemente, leí el libro No-Cosas del filósofo y ensayista surcoreano Byung-Chul Han y me ha dado mucho a reflexionar; comenzaré entonces con una afirmación:

Esto que leen aquí es simple información que leen desde un dispositivo (móvil o no) en el cual crean, leen, editan pero sobre todo, comparten información. Sea esta texto, vídeo, foto, audio, etc.

Al final, todo es información.

Esa foto de tus nuevos YEEZY, Salomon, ASICS o New Balance. Es información, la foto es una carga de píxeles que muestran tu par y LA FOTO NO ES TU PAR EN SÍ. La cosa, el objeto, tu par, ese es el verdadero objeto con valor, NO la foto, no importa cuántos likes tenga.

Esta pintura arriba de René Magritte por ejemplo, es una muestra clara de ello, la pintura no es una pipa, es el “retrato” de una pipa, pero no por ello se convierte en una pipa y aún así, la pintura como el todo, es lo que realmente tiene valor.

Muchos de los pares OG que hoy nos llegan como Retro o ciertos colorways o estilos son pares que cuentan distintos tipos de historias:  las de un atleta, de un artista o de un diseñador. De un evento histórico pero, nosotros al tenerlos NO SOMOS ese atleta, artista, diseñador, ni mucho menos vivimos ese evento histórico. Sin embargo, nosotros le damos un nuevo valor, lo hacemos contar y vivir una nueva historia: LA NUESTRA.

Nike Air Zoom Alphafly Next%, mi primer medio maratón después de pandemia y mi regreso a los maratones después de una lesión de rodilla.

Piensen por ejemplo en esos pares por los que no hay que formarse, un sencillo par de Chucks, unos Old Skool de Vans, unos Pegasus de Nike, ninguno de estos pares conlleva una dificultad para conseguirlos, son pares “sin hype” pero eso sí: con ellos terminas tu primer maratón, bajas tu primer flip, tienes tu primera cita, aprendes a manejar, te casas. En ese momento ese par, esa cosa, cobra vida y se vuelve parte de ti y de tu espacio.

Converse Chuck Taylor 70 en color «sunflower», un par simple y perfecto que ahora cuenta una nueva historia en mi vida.

Hace unos años les hablé del minimalismo y de cómo logré que mi gusto por los tenis y esta nueva filosofía de vida convivieran en conjunto y no, con este ensayo no vengo a decirles que “volví al vicio” sino que de hecho mediante este libro de Chul Han encontré la razón para que tengan aún más valor cada uno de los pares que poseo, sea un Converse de A-Cold-Wall*, un Yeezy, unos Slip-On o un Chuck Taylor 70.

Estos Lunar Force del XXX Aniversario del AF-1; no solo son especiales por su construcción y materiales, sino porque me han acompañado en varios de mis viajes.

En tus pares van más que tus pies y los pasos que en ellos pones.

Un par para reventa es una simple cosa con valor económico que adquiere dicho valor por la dificultad para conseguirlo, el colorway, talla, marca, diseño; etc. pero es entonces una cosa, un par; sin vida. En cambio, un par que además de valor económico tiene un valor sentimental o incluso histórico en tu propia historia de vida, será un par que te cueste más trabajo dejar ir, como es mi caso con este par de Vans Rowley XL2 “Camo”.

Los Rowley XL2 de esta foto llevan conmigo casi 20 años, les cambié la suela una vez, las agujetas, tal vez unas 3 y vieron mi primer f/s crooked, mi primer f/s lipslide y mi primer heelflip.

¿Tus pares tienen vida o simplemente tienen valor? Desempacados vivos para ti, no para tu feed.